darte cuenta que es irrepetible, inmejorable;
que es esa persona (solo tú)
y nadie más ajustará la reacción.
Tienes una intensa mirada llena de protones positivos
que hace que mis electrones negativos de esfumen;
ya no hablemos de la fuerza de tu sonrisa
que hace la mía más estable, como un gas noble.
No me hagas hablar de tus ojos cationes,
tampoco de los labios que tienes por aniones
o de las ganas que tengo de unirlos y formar
una nueva molécula aunque sea incompleta
Tan distintos son nuestros orbitales
y tan iguales las sustancias que nos unen.
Solo tus átomos y mi piel,
que con tan solo un roce aceleras mis partículas.
Dos elementos diferentes y a la vez tan iguales
que forman un enlace covalente.
Tenemos una electronegatividad semejante
aunque no idéntica.
Con esta unión que hemos establecido
ninguno pierde electrones,
hemos aprendido a compartirlos.
Juntos cumplimos la regla del octeto.
Y esta química que no tiene explicación científica
y tampoco la tiene con letras
y solo quiero vivirla contigo
Alba Peláez
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