sábado, 3 de marzo de 2018

SONREIR

Aprendí a sonreír...

Escucharé en la radio esa canción que me recuerde a ti, y sonreiré, aunque el alma este hecho pedazos, porque sí, es verdad, te echo de menos...
Hace mucho que no te veo, que no te siento, te veo lejos, como una estrella en el cielo que sé que nunca llegaré a alcanzar.
Tu siempre sonreías por cualquier estupidez que se me ocurría decir, y tenías una sonrisa preciosa, y lo único que podía hacer yo era sonreír a tu vez.
Me enseñaste a quererme más y no darme por vencida, me enseñaste a ver las cosas de otra manera, a pensar en los imposibles y hacerlos realidad. Me enseñaste a valorarme y a creer más en mí, pero sobretodo, me enseñaste a primero sonreír y luego encontrar el motivo, porque cualquier motivo vale si se trata de ser feliz.
Me diste la mano cuando la necesitaba, ya ahora te la doy yo, y te prometo que nunca, y ahora sí que lo puedo afirmar, NUNCA la soltaré.

Leyre Ojer

No hay comentarios: